Logan y Julia ya tenían un punto a favor, que era descubrir el verdadero asesino de Alí. Ahora el siguiente paso sería desmontar su coartada y, para eso, debían seguirlo y pensar en un plan bien elaborado.
Si Alí murió fue porque, en esta ocasión, Moncho no fue a la cárcel pero, en la historia original, Moncho fue apresado y acusado de violencia doméstica gracias al propio Alí, uniéndose luego el propio Moncho a la banda de Gregor y compañía.
Entrando en la casa de Gregor, Moncho llegó justo en el momento en el que él y Mohamed Salah, el auténtico, cerraban el trato de colaboración que traería consigo a las chicas con la consiguiente trama de blanqueo, tráfico de personas, secuestro, violación…
Fuera, Logan se había echado a temblar al ver la casa y todo lo que eso conllevaba.
- Julia, nos estamos metiendo en un tema muy turbio, diría que demasiado para nosotros.
- ¿Por qué lo dices?
- ¿Sabes de quién es esa casa?
- No, la verdad.
- Es de Gregor Andrews, un magnate al que las autoridades siempre han querido echarle el guante pero que nunca lo han conseguido. Ese tío es muy peligroso y sobre todo la gente que le rodea… Ahora entiendo por qué nunca pillaron a Moncho.
Pero Julia no parecía estar tan afectada como su novio.
- Logan, pero nosotros tenemos una ventaja sobre él.
- ¿Cual?
- La máquina del tiempo, al igual que hicimos deteniendo al asesino de tus abuelos y tu tío abuelo yendo al pasado, lo que podemos hacer es viajar a esta mañana y evitar que maten a tu padre.
- ¿Pero cómo? Si vamos a la policía no nos creerá y nos mandará de paseo.
- ¿Y Agatha?
- ¿Qué pasa con ella?
- Confía en mí.
Viajando en el tiempo a esa misma mañana, Logan y Julia aparecieron tras la casa de Agatha. La idea de la muchacha era pedirle ayuda a Agatha, ya que sin ella no habría podido salvar a Gloria de las garras de Moncho y Agatha sabría qué hacer.
Logan no estaba del todo convencido porque él sabía que Agatha era la hija de Peter, que fue agente del FBI, pero no sabía nada de ella salvo lo que su madre le había contado de que la salvó de Moncho en el pasado.
Tras llamar al timbre, la pareja esperó durante unos segundos hasta que Susan abrió la puerta.
- Buenos días,-saludó Susan-. ¿Qué desean?
- Buenos días, soy Julia, una amiga de Agatha.
- Ah sí, mi hermana me comentó algo de ti. Pasad.
Entrando en la casa, Susan los invitó a sentarse frente a la chimenea.
- Esperad aquí mientras yo voy a buscarla, no tardo.
- Muchas gracias,-dijeron ambos-.
Cerrándose la puerta de la nevera, Loreen miró hacia los recién llegados y los saludó.
- Hola, buenos días, soy Loreen, la hija de Agatha.
- Buenos días, yo soy Julia y éste es mi novio Logan.
- Uh, Logan, bonito nombre.
- Muchas gracias Loreen,-contestó el chico-.
- ¿Y estáis buscando a mi madre?
- Sí,-dijo Julia-. Somos amigos de ella y necesitamos su ayuda.
- Ahora que lo pienso… Claro, mi madre me comentó algo sobre una chiquita que le vino a pedir ayuda hace unos años. ¿No viniste también a la fiesta de cumpleaños de mi hermana?
- Sí, a su 18 cumpleaños.
- Ya decía yo que me sonaba tu cara.
Justo mientras Julia y Loreen charlaban, ambas chicas escucharon la voz de Agatha saliendo del salón.
- Mi querida amiga Julia, cuánto tiempo sin verte, aunque para ti hayan pasado 30 minutos, ¿no ¿Qué te trae por aquí?
Una vez que ambas estuvieron cerca se abrazaron con fuerza. Pese a que se acaban de conocer, metafóricamente hablando, habían entablado amistad.
- Necesito tu ayuda,-dijo Julia-.
- ¿Más problemas en el futuro?
- Me temo que sí.
Separándose, las dos mujeres comenzaron a hablar sobre el motivo de la visita.
- ¿Qué ocurre?-preguntó Agatha-.
- Esta tarde van a matar a Alí y no debería ocurrir.
- ¿Matarlo? ¿Por qué?
- Por venganza. Acabamos de venir de ver su asesinato y hemos descubierto que quien lo hizo fue Moncho.
Entristeciendo su expresión, Agatha se apenó al escuchar lo que iba a suceder.
- Joder, me lo temía… Cuando ayudamos a Gloria hace unos años pensé que ese tipo de hombre son de los que no se pueden quedar quietos y superar una ruptura como hemos hecho todos. Entonces vayamos a pararle los pies de nuevo.
- Esta vez no es tan fácil Agatha. En esta ocasión Moncho tiene muy bien cubiertas las espaldas porque se ha unido a la banda de… ¿cómo me has dicho que se llamaba cariño?-le preguntó Julia a Logan-.
- Gregor Andrews.
Dando un paso atrás, Agatha se llevó la mano al pecho bastante sorprendida.
- ¿Qué tiene que ver ese desgraciado en todo esto?-preguntó Agatha bastante alterada-.
- Pues que es el jefe de la banda y Moncho pertenece a ella,-contestó Logan-. Es un hombre con mucha influencia y Moncho junto con dos más forman la banda.
- Agatha, ¿sabes algo que deberíamos conocer nosotros también?-preguntó Julia-.
- Ese hombre y yo somos viejos conocidos, aunque más que conocidos somos… ex-pareja y compartimos muchas cosas…
- ¿Cuántas cosas?-quiso saber Logan-.
- Dos hijas.
- Joder, pues ese tío es de lo peor que hay,-comentó Logan-.
- Por eso hemos acudido a ti,-dijo Julia-. Necesitamos ayuda para evitar que maten esta tarde a Alí.
Volviéndose a Loreen, Agatha le dio unas indicaciones a seguir.
- Me voy con estos amigos y volveré cuando hayamos solucionado el problema. Por si acaso, cerrad todas las puertas y entradas que haya en la casa, ¿vale? Y cuando yo llegue, antes de entrar con la llave, daré tres toques al timbre, así sabréis que soy yo, ¿de acuerdo?
- Mamá, ten mucho cuidado.
- Tranquila, estoy en buenas manos. Vámonos,-dijo Agatha iniciando el paso hacia la puerta-.
- ¿A dónde vamos?-preguntó Logan-.
- Ahora lo verás.
Caminando durante unos diez minutos, Agatha se paró frente a la casa de Bárbara y Mehmet.
- Pero esta es la casa de mis tíos abuelos,-dijo Logan-, ¿qué hacemos aquí?
- De puertas para fuera, tu tío Mehmet es oficinista,-contestó Agatha-, pero es una tapadera porque trabaja para el FBI. Cuando lo salvaste de morir junto a mi padre a manos de Arnold, él le ayudó a encontrar un trabajo y supo ver su potencial. Ahora Mehmet es uno de los imprescindibles dentro de la organización y será él quien nos eche el cable que necesitamos.
- Flipa colega,-dijo Julia-. Tu familia es una caja de sorpresas.
- ¿Y esto lo saben mis padres?-preguntó Logan-.
- No, sólo lo saben Bárbara y sus hijos, tus tíos vaya,-contestó Agatha-.
Abriendo la puerta, Mehmet recibió a Agatha con una sonrisa.
- Pero bueno Agatha, menuda sorpresa verte por casa. ¿Qué te trae por aquí?-dijo dándole un abrazo-.
- Trabajo. Mis amigos y yo necesitamos tu ayuda.
- ¿Necesitas ayuda con algún papel?
- No me refiero a mi trabajo, sino al tuyo.
- Entiendo… Pasad conmigo.
Agatha confiaba ciegamente en Mehmet y, tras pedirle permiso a Logan y Julia, le contó la historia.
- Van a matar a tu sobrino Alí,-dijo Agatha-.
- ¿Cómo? ¿Qué pruebas tenéis?
- Te va a sonar extraño pero, ¿este chico pelirrojo de aquí no te recuerda a nadie?
- Pues así de primeras… No. ¿Debería?
- Tal vez sí porque hace muchos años te salvó la vida junto a mi padre.
- Joder, ¡es verdad! Te llamas Logan, ¿cierto? Pero, ¿cómo es posible? Han pasado más de quince años y estás exactamente igual.
Justo cuando Logan iba a responderle, Bárbara entró en casa proveniente del jardín.
- Oh, hola cariño,-dijo Bárbara-. No sabía que tenías visita. ¿Qué tal Agatha?
- Hola guapa. Perdona que te hayamos robado a tu marido unos minutos pero hay algo importante de lo que debemos ocuparnos en la agencia…
- Nada, tranquila, vosotros seguid a lo vuestro, que yo voy a ver cómo está Murat.
Llamando a la puerta, Bárbara entró y vio a su hijo enganchado al ordenador.
- ¿Ya estás otra vez con el ordenador?
- Esta vez es para una buena causa mamá, te lo prometo.
- ¿De qué se trata?
- Quiero ser policía. No como papá en el FBI, un policía normal y corriente. Estaba mirando ahora qué hay que hacer para prepararse.
En el salón, Logan le contestaba a su tío abuelo Mehmet la pregunta que había formulado antes de que entrase Bárbara.
- Estoy igual que hace tantos años porque, aunque suene difícil de creer, viajamos por el tiempo y yo soy el hijo de Alí y Gloria. De hecho, mi madre está embarazada de mí ahora mismo y todavía no lo sabe. Si te fijas, soy pelirrojo y tengo los ojos azules como mi abuela.
- Como Martina, es cierto… Dios, qué fuerte. ¿Me lo dices en serio? ¿Soy tu tío abuelo?
- Lo eres, aunque parezca mentira ahora. Por eso Agatha nos ha traído aquí, para pedirte ayuda y evitar la muerte de mi padre.
Agachando la mirada, Mehmet se quedó en silencio durante unos minutos y luego miró a su sobrino.
- Está bien, ¿qué necesitáis que haga?
- Vale, lo primero que harás será ir a casa de mis padres,-dijo Logan-. Cuando llegues, nosotros estaremos detrás de la escalera, pero no nosotros con los que estás hablando, sino los Logan y Julia de hace un rato.
- ¿Cómo? No me entero.
- A ver, te explicaré las cosas de otra forma para ver si me hago entender mejor…
Una vez que terminaron de hablar, Logan y Julia se quedaron con Agatha en su casa mientras que Mehmet iba a la casa de su sobrino. Antes de llamar a la puerta, miró a su derecha y llamó a Logan.
- Eh, Logan. Sé que Julia y tú estáis detrás de la escalera, no temáis. Me envían vuestros “yo” del futuro.
Con cierto reparo, Logan salió de su escondite y se acercó a Mehmet, quien mantenía una sonrisa en la cara.
- Estoy aquí para ocuparme del asesinato de tu padre, no te preocupes, pero para que yo pueda estar aquí vosotros tenéis que viajar en el tiempo a esta mañana para pedirle ayuda a Agatha. Moncho es el que va a intentar asesinar a tu padre y decidle a Agatha que se refugia en casa de Gregor Andrews. Ella ya sabrá lo que hacer.
- Esto… vale.
- Venga, ahora no perdáis más el tiempo y largaos. Tengo un asesinato que impedir…
Una vez que Logan y Julia se marcharon, Mehmet llamó al timbre y Alí le abrió la puerta.
- ¡Tío Mehmet! Qué agradable sorpresa. ¿Qué haces tú por aquí? ¿Hoy no trabajas?
- ¿Qué tal Alí? No, hoy tengo el día libre y he pensado en que me vendría bien visitar a uno de mis sobrinos.
- Bueno pues adelante, pasa.
Entrando en casa, Mehmet abrazó a Alí con más fuerza que de costumbre ahora que sabía que iba a ser padre y que podría morir ese mismo día.
- Tito, suéltame hombre, ¿qué te pasa?
- Nada, nada. La edad que no perdona y estoy más sensible de la cuenta…
Saliendo del dormitorio de cambiarse, Gloria también abrazó a Mehmet.
- Me alegro de verte por aquí, Mehmet. Lástima que me tenga que ir a trabajar. ¿Te vas a quedar mucho rato?
- No lo sé.
- Si quieres, llama a Bárbara y dile que estáis invitados a cenar luego, ¿vale?
- Estupendo, yo se lo digo.
Justamente cuando Gloria se iba a ir porque iba a llegar tarde, Alí la agarró y la besó.
- Te echaré de menos, Gloria.
- Y yo, guapo. Hasta luego. Ah, y adiós Mehmet. Me he alegrado mucho de verte.
- Lo mismo digo Gloria, que te sea leve.
En cuanto Gloria se marchó de casa, Moncho sonrió al igual que en la ocasión anterior. Lo que él no sabía era que esta vez Alí no estaría solo, sino que tendría la compañía de su tío Mehmet.
Ya en soledad, Mehmet cambió su expresión y avisó a su sobrino.
- Estás en grave peligro Alí.
- ¿En peligro? ¿Por qué?
- ¿Te acuerdas de Moncho?
- ¿El ex de Gloria? Sí.
- Pues ahora mismo está viniendo hacia acá para matarte.
- ¿Cómo? ¿Y cómo sabes tú todo esto?
- No hay tiempo de explicaciones, Alí,-dijo justo cuando se comenzó a escuchar el trasteo de Moncho intentando abrir la puerta-. Rápido, escóndete en el baño y no salgas hasta que yo te diga “Logan”. Esa será la clave.
CONTINUARÁ…
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