lunes, 3 de mayo de 2021

Capítulo 28 || Condena

 Que ese nuevo profesor le mandase recuerdos a sus padres le sonó muy raro a Nico.

- ¿Conoce a mis padres?

- No, pero es de buena educación mandar saludos a los progenitores de tus alumnos.

- Ah… ya.

- Bueno, lo dicho… Vuelve a casa y dentro de un rato irá tu hermana para allá, ¿vale?

- De acuerdo…-aceptó Nico sin estar muy convencido-.


 En cuanto Kilian se dio la vuelta, cambió su expresión radicalmente.

- Puto niño de los cojones… Como sea igual de coñazo que su padre, me voy a tener que encargar de él también.


 Viendo la cara de pocos amigos que tenía su profesor, Selene no podía ocultar su miedo y nerviosismo.

- ¿Qué ocurre Don Roberto?

- ¿Se puede saber qué coño has estado haciendo para escribir lo que te ha salido de los cojones?

- Es que no me acordaba del texto literalmente y lo escribí con mis palabras

- ¡Eso no puede ser! Os dije a todos muy claramente que quiero el texto tal y como yo os lo dicto. ¿Qué has hecho durante estos días? ¿El vago?

- Profesor, le prometo que he estado encerrada en mi cuarto toda la semana estudiando para este examen. Creía que me lo sabía muy bien.

- ¡Mientes!-gritó Kilian con fuerza-. Es imposible que eso sea cierto con las notas tan bajas que sacas siempre en mi asignatura.


 Nico estaba comenzando a irse cuando el grito del profesor lo frenó.

- ¡Mientes!-se escuchó desde el pasillo-.

- ¿Pero qué cojones?-dijo Nico dejando de caminar-.


 Dentro, la situación era de lo más tensa.

- Don Roberto, le prometo que le digo la verdad. He dejado de salir con mis amigos, apenas salgo de mi habitación salvo para almorzar, duermo mal por culpa del estrés…

- ¿Y qué me quieres decir con eso? No te estarás atreviendo a echarme las culpas después de todo, ¿verdad?

- No, le juro que no. Sólo que con su asignatura me esfuerzo el triple que con las demás y nunca llego a aprobar cuando en las demás siempre saco notables.

- Pues a este paso vas a seguir sin aprobar y no podrás ir a la universidad.


 El hecho de pensar que no podría ir a la universidad, ponía a Selene muy triste.

- No, profesor, por favor. Necesito aprobar su asignatura. Mire, haré lo que sea, haré trabajos extra, me encerraré en mi habitación más todavía para estudiar su asignatura… Pero por favor, no me suspenda.

- No sé Selene… Estoy muy disgustado contigo. Eres la peor alumna que tengo en este instituto con diferencia. No sé si te mereces otra oportunidad.

- De verdad, haré lo que haga falta. Me da igual, Don Roberto, pero no me suspenda…


 Después de ese grito, todo volvió a la calma y Nico no escuchó ninguna voz más. Indeciso sobre si irse o quedarse, comenzó a pensar en que sería buena idea esperar a su hermana, aunque ésta tardase algo más de la cuenta. ¿Y si su profesor le volvía a gritar de esa forma? Nico no podría soportar ver a su hermana ante semejante presión.


 Tras escuchar a Selene, Kilian comenzó a sonreír de una forma que asustó mucho más a la joven muchacha.

- ¿Lo que haga falta dices?

- Sí, lo que sea. Dígame lo que quiera y yo lo haré.

- Muy bien, chúpamela.

- ¿Cómo dice?-preguntó Selene mientras que Kilian se bajaba los pantalones y le enseñaba su duro miembro-.

- Que me chupes la polla. Veamos si eres mejor en esto que en mi asignatura y… depende de cómo me lo hagas, te mejoraré la nota o no.


 Nico llevaba diez minutos esperando a su hermana y el instituto se encontraba en completo silencio. Acercándose hasta la puerta, pudo ver a su hermana bajo la mesa chupándole la polla al profesor.

- Espera, espera… ¿qué cojones hace Selene chupándole la polla al maestro? Será hijo de puta…


 Dentro, Kilian disfrutaba de la mamada mientras que Selene lloraba amargamente en completo silencio.

- Joder, se nota que eres una zorra… Seguro que te viene de familia. Sigue chupando, que me voy a correr en tu boca. Y si te lo tragas, te pongo un 9’5 en este examen… Ah, joder, ahí viene…


 Nico dejó de mirar para no ser descubierto y se quedó pensando en si sería la primera vez que su hermana hacía algo así o no.

- Conozco a Selene y no lo hace por gusto, vamos creo yo… Supongo que es más idea del profesor que de ella, estoy seguro. Será cabrón, ese puto cerdo asqueroso… En cuanto llegue a la casa se lo digo a mi padre y a mi tío. Se le va a caer el pelo.


 A los pocos minutos, una cabizbaja Selene salió de la clase con restos de semen en su rostro. La muchacha se sentía sucia, destrozada y abandonada a su suerte. A partir de ese momento, si quería aprobar, tendría que jugar al asqueroso juego de su profesor y, de sólo pensarlo, más se deprimía.


 Pero la figura de su hermano se dibujó frente a ella y eso la frenó en seco. Intentándose quitar los restos con sus manos, supo al instante que Nico ya lo sabía.

- ¿Qué haces aquí?-preguntó Selene-.

- Esperarte, como hago siempre.

- ¿Has visto…?

- Sí y sé que no es cosa tuya.


 Intentando no llorar, Selene comenzó a explicarle lo sucedido con voz temblorosa.

- Es que… me dijo que no iría a la universidad y le supliqué que me aprobase, que haría lo que hiciera falta y comenzó a sonreír como un cerdo y me obligó a que se la chupase y que me tragase la corrida.

- Qué hijo de puta, lo voy a matar, te lo juro…

- No, por favor. No… Estoy bien, es sólo que…


 Y sin dejar que Selene terminase la frase, Nico la abrazó.

- Conmigo no hace falta que disimules, hermanita. Sabes que yo voy a estar contigo hasta la muerte, en las buenas y en las malas, igual que tu padre y el mío están el uno para el otro.


 De repente, Selene se separó y miró seriamente a su hermano.

- Nico, esto debe quedarse entre nosotros dos.

- Pero, ¿por qué? Ese tío es un cerdo.

- Lo sé, pero tengo que hacer lo que dice para aprobar. El año que viene ya me voy a la universidad y lo perderé de vista para siempre, así que prefiero aguantar lo que quede de curso y luego irme lejos de aquí.


 Nico no estaba muy de acuerdo con eso, pero su hermana lo miraba tremendamente seria.

- No sé Selene, no deberías estar pasando por esto. Si tu padre o el mío lo supieran, sabrían cómo actuar mucho mejor que nosotros.

- Tal vez, pero no quiero preocuparles más de lo que ya están por mí. Sabes perfectamente que tu padre es como un segundo padre para mí y le partiría el corazón enterarse de esto.

- Ya, por eso mismo Selene…

- Nico, no. Prométeme que no se lo dirás a nadie.

- Vale, vale…

- No, eso no cuenta. Me lo tienes que prometer.

- Joder, está bien. Te prometo que no le hablaré a nadie de lo que me has dicho.


 Tras salir del baño y limpiarse, Nico y Selene volvieron a casa y allí se encontraron con Hyun.

- ¡Hola tito!-saludó la muchacha-.

- ¡Hola hija! ¿Cómo fue el examen?

- Bien, he aprobado…

- ¡Esa es mi niña! Sabía que lo aprobarías.

- Gracias… Bueno, me voy abajo a ducharme.


 Tras Selene, entró Nico.

- Hola papá.

- Hola campeón. ¿No habéis llegado muy tarde?

- Sí, es que nos hemos entretenido por el camino… La culpa es mía.

- ¿Culpa? Aquí nadie te está juzgando de nada, hijo… ¿Pasa algo?

- No, de verdad.


 Nico miró cómo su hermana bajaba por las escaleras mientras que el nudo de su garganta iba en aumento.

- Te noto raro… ¿Seguro que no me estás ocultando nada?

- No…-dijo Nico cada vez más inseguro y pensando en si debería romper la promesa o no-.


 Conforme Selene entró en su cuarto, se arrancó la ropa lo más rápido que pudo y se metió en la ducha llorando amargamente recordando lo sucedido. Aquella había sido la primera experiencia sexual con alguien que no fuera ella misma, y encima había sido un abuso sexual por parte de su profesor, quien la amenazaba constantemente y de quien tenía miedo… La situación no pintaba muy favorable para ella y eso la hacía hundirse más y más.


 Sentándose tranquilamente frente a la barra de la cocina, Hyun le daba pequeños sorbos al vaso de agua.

- Desembucha, que sé que me estás ocultando algo.

- Es que… papá, he hecho una promesa de no contarlo.

- Pero tú tienes ganas de decirlo, ¿cierto?

- ¿Cómo lo sabes?

- Hijo mío, soy tu padre y también bastante más mayor que tú, por lo que he vivido más y tengo más experiencia en la vida. ¿Qué te dicta tu corazón?

- Que lo cuente…

- Entonces adelante. Te escucho.


 Nico cambió su expresión al comenzar a recordar lo sucedido y puso a su padre en contexto.

- Fui al pasillo a recoger a Selene como hago todos los días para volvernos juntos, pero hoy tardó un poco más. Recordé que sería por el examen y cuando ya habían salido todos sus compañeros, ella seguía allí. Total, que cuando termina el examen y lo entrega, justo antes de salir su profesor le pide que se quede, que necesita hablar con ella. Hasta ahí todo bien.

- Ajá. Sigue.

- Como Selene le dijo que la estaba esperando, el propio profesor me dijo que me marchase y me dio recuerdos para mamá y para ti. Eso me sonó muy raro, porque me dijo que no os conocía… Al final comencé a marcharme cuando escuché un grito del profesor y cuando me acerqué de nuevo a la puerta a espiar, me encontré a Selene…

- ¿Cómo? ¿Le había pegado?

- No… El profesor estaba sentado en su silla y Selene estaba arrodillada frente a él…


 En cuanto escuchó eso, Hyun se levantó del banquito como un resorte.

- ¿Se la estaba chupando?

- Sí. Luego Selene me dijo que él le había obligado porque de esa forma le aprobaría el examen y que si no lo hace a partir de ahora no irá a la universidad.

- Ese hijo de puta me va a escuchar. Voy a decírselo ahora mismo a tu tío. Kwan debe saberlo también.

- Espera papá, ¿y qué coño vais a hacer? ¿Pegarle? No tenéis pruebas contra él… Tú mismo deberías saberlo, eres abogado.

- Me da igual, nadie le hace eso a mi niña. Te juro que lo reventaré, lo mataré con mis propias manos…

- Papá, nunca te había visto así de enfadado.

- Esto no te lo he contado nunca, pero yo también maté a alguien.


 Nico abrió sus azules ojos de par en par.

- ¿Cómo dices? ¿A quien?

- Al superior de tu tío cuando empezó la guerra. Tu tío Kwan y sus compañeros cayeron en una trampa orquestada por un sargento y por un ex-compañero, quien fue el que mató a tus abuelos y me intentó matar a mí.

- ¿A ti? Mamá me contó lo de los abuelos, pero no me dijo nada sobre ti…

- Pues sí hijo. Yo recibí un balazo en el hombro y quedé malherido, pero sacando fuerzas de flaqueza fui a un veterinario amigo de la familia, me ayudó con la herida y fui en busca de esos dos. Al final encontré al superior de tu tío y cuando me dijo su paradero, lo maté.

- Joder papá… ¿Y qué hiciste con él?

- Ese tío se estaba acostando con una prostituta, así que le di dinero a la chica y le dije que enterrase el cuerpo y se marchase lejos de allí.

- Madre mía… ¿Y serías capaz de matar al profesor de Selene?

- Y con mucho gusto. Con mi familia no se mete nadie…


 Mientras tanto, Kwan entraba en la habitación de Selene.

- Hola bichito, ¿cómo estás?

- Papá, tengo 17 años, ¿puedes dejar de llamarme así?

- Lo siento hija, pero para mí serás siempre mi bichito. ¿Qué tal fue el examen?

- Bien papá, no te preocupes.

- Me alegro cariño. ¿Sabes? Estoy muy orgulloso de ti. Eres prácticamente una universitaria y aunque estos momentos sean complicados, luego los recordarás con añoranza.


 Sin poderlo evitar, Selene se abrazó a su padre para que éste no se diese cuenta de que estaba comenzando a llorar.

- Pero bueno Selene, ¿y este abrazo?

- Te quiero mucho papá.

- Y yo a ti cielo. ¿Estás bien?

- Sí, es solo que a veces estoy muy metida en mis cosas y no soy consciente de lo mucho que te necesito a ti y al resto de la familia.


 Recuperando un poco la compostura, Selene soltó a su padre y lo miró con una sonrisa.

- Oye papá, a ver cuándo nos pasamos por una peluquería. Menudos pelos me llevas…

- Ya, lo sé. Tengo que ir a cortarme el pelo, pero entre una cosa y otra se me ha ido pasando. A ver si mañana voy…


 Dejando a Nico, Hyun se marchó a su habitación para poder pensar con tranquilidad sobre cómo debía actuar, pero allí se encontró con Pilar y tuvo que disimular.

- Ah, hola Pilar. No sabía que estarías aquí.

- Ah sí, me estoy cambiando que he quedado ahora con Helen para irnos al centro comercial. ¿Pasa algo?

- No, tranquila.


 Una vez que Hyun se quedó solo, comenzó a recordar y a recapitular sobre lo que Nico le había contado y llegó a una conclusión.

- Ese profesor lleva meses siendo extremadamente duro con Selene y hoy ha cruzado una línea que no debía. Pero, si Selene lleva el resto de asignaturas medianamente bien, ¿por qué la suya no? ¿Y a qué venía que ese señor nos mandase saludos a nosotros? ¿Y si nos conoce y le ha mentido a Nico? Pero, si sabe quiénes somos… ¿Quién trataría así a…?-decía Hyun justo cuando una persona se le presentó en su mente y todos los vellos del cuerpo se le erizaron-. Kilian.


CONTINUARÁ…


1 comentario:

  1. Ufff, qué fuerte. Pobre Selene pero menos mal que Nico lo ha contado y que Hyun haya pensado en Kilian. Desde que apareció Kilian, no he dejado de desear que lo maten y espero que no se libre de ésta que ya lleva mucho tiempo dando por saco a Kwan y a la familia.

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